Por Rodrigo
Motas Tamayo  
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Con un buen
accionar en la prestación de los servicios y la morbilidad, cerraron el 2010
los trabajadores del hospital ginecobstétrico Fé del Valle, institución  médica 
manzanillera donde  se atienden
pacientes de los municipios de la otrora región Guacanayabo. 
El año recién
concluido reporta una tasa  de
mortalidad  infantil de Dos coma Uno  por cada mil nacidos vivos, muestra de la
fehaciente labor desarrollada en la atención a embarazadas y sus hijos.
La doctora Sara Mirabal Pompa, directora  de esta instalación  médica, destacó  que 
culminaron  el año  con menos cuatro fallecidos en Servicios
Prematuro Cerrado, y menos tres en abierto, para menos siete occisos  en comparación con el año anterior.
Mirabal Pompa
especificó  que  solo subieron en los índices de Bajo Peso,
esta vez  con 208,  cincuenta y cuatro más que los resultados del
2009, y las principales causas están en la sepsis vaginal, la hipertensión
gravílica, malos hábitos dietéticos y otras patologías crónicas asociadas al
embarazo.