DECEMBER TWO: BOW TO FREEDOM

By Rodrigo Tamayo Motas

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The sea is raging between the strong waves lift the boat while holding the course for the mainland, two day delay in its arrival but nothing stops him in his journey toward the dawn.
Eighty-two men stare at the horizon in search of the promised island, the weather hit but not give up before the dizziness and vomiting.
Seven days earlier, leaving behind the port of Tuxpan, Veracruz, in Mexico, the expedition members sang the national anthem and the start of July 26, and his voice broke the night with shouts of Viva la Revolution! and Down with Tyranny!

There are eighty-two young Fidel in front and a single beat of heart and hope to spread: We will be free or martyrs and the belief that if you came and if they came out triumphant.

 The boat speed is constant. And frequent high waves washed the foredeck. The announcement of the nearest landing, desperation and little sleep. A strong wave shakes the boat and the watch falls into the sea. "! Man overboard," shouted several. Fidel ordered to stop for rescue.

With a rope and with some effort, manage to rescue him. The excitement is shared "Viva Cuba libre!" Doctors and Faustino Pérez Ernesto Guevara met his first assist of the season.
When he saw the lights of Cabo Cruz lighthouse growing expectation. Fidel reports that soon landed on a nearby point of Niquero and showcases the military structure that would take.
At one end of mangrove named The Cayuelos, two kilometers from the beach Color-which is where they should have gone down, "the Granma aground forward forcing the landing. It was 6:50 pm on December 2, 1956.

54 years after that heroic epic, the saga of Granma sailing the stormy seas of this world convulsed with his victorious bow to the XVII World Festival of Youth and Students pay tribute event, from 13 to 21 December in South Africa, Nelson Mandela and the leader of those 82 expeditionary: our Fidel Castro Ruz.

DOS DE DICIEMBRE: PROA HACIA LA LIBERTAD

Por  Rodrigo Motas Tamayo

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La mar se levanta embravecida entre fuertes olas mientras el yate mantiene el rumbo hacia  tierra  firme, dos días lo atrasan de su llegada pero nada lo detiene en su travesía hacia el amanecer.  

Los ochenta y dos  hombres miran el horizonte en busca de la isla prometida, las inclemencias del tiempo los azotan pero no claudican ante el mareo y los vómitos.

Siete días antes, al dejar atrás el puerto de Tuxpan, Veracruz, en Méjico, los expedicionarios  cantaron el Himno Nacional y la marcha del 26 de Julio, y sus voces rompieron la noche con gritos de ¡Viva la Revolución! y ¡Abajo la Tiranía!

Son ochenta y dos jóvenes con Fidel al frente y un solo latido de corazón y la esperanza repartida: SEREMOS LIBRES O MÁRTIRES y la convicción de que si salían llegaban y si llegaban triunfaban.

 La velocidad  del yate es constante. Altas y frecuentes olas bañaban la cubierta de proa. El anuncio del cercano desembarco, desespera y pocos pueden dormir. Una fuerte ola sacude la embarcación y el vigía cae al mar. "!Hombre al agua!", gritan varios. Fidel ordena detener la marcha para rescatarlo.

Con una soga y con bastante esfuerzo, logran rescatarlo. La emoción se reparte "!Viva Cuba libre!" Los médicos Ernesto Guevara y Faustino Pérez cumplen su primera asistencia de campaña.

Al divisarse las luces del faro de Cabo Cruz crece la expectativa. Fidel informa que pronto desembarcaran por un punto cercano de Niquero y da a conocer la estructura militar que asumirían.

En una punta de mangle nombrada Los Cayuelos, a dos kilómetros de la playa Las Coloradas—que es donde debieron haber bajado—, encalla el Granma obligando a adelantar el desembarco. Eran las 06:50 horas del 2 de diciembre de 1956.

54 años  después de aquella  heroica epopeya, la gesta del Granma surca los mares turbulentos de este mundo convulso con su proa victoriosa hacia el XVII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes, evento que homenajeará, del 13 al 21 de diciembre en Sudáfrica, a Nelson Mandela y al líder de aquellos 82 expedicionarios: nuestro Fidel Castro Ruz.