Por Rodrigo Motas Tamayo (crónica)
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Y tu sonrisa repartida desanda por las calles, las casas,
las obras y en cada niño que te clama como el ejemplo perenne del
revolucionario cabal.
Multiplicada en
millones de cubanos se alza tu figura de verde olivo, y el sombrero alón de aquel hombre humilde crece como símbolo
cada 28 de octubre para
recordar al Héroe de Yaguajay.
Y es que Camilo Cienfuegos Gorriarán hizo de su vida una
inolvidable página de verdadero revolucionario, expedicionario, hombre de pueblo, y más que todo, de Héroe.
El Señor de la Vanguardia , ese hombre cuya estatura
revolucionaria se alimenta de mil anédoctas
de su accionar humano y guerrillero, transita por las escuelas, fábricas, parques y como arroyo
se abre al mar en arcoiris de flores.
Y Cuba
entera florece en este 28 de octubre desde sus ríos, arroyos y
dondequiera que el agua emerja como fuente de vida, porque la vida que
entregaste 51 años atrás al pueblo es
expresión de ternura en las páginas de la historia.
Y así palpita su corazón en el corazón del pueblo, y
vuelven las palabras del Comandante en
Jefe Fidel Castro a dar la sabia de la
semilla sembrada aquel primero de enero de 1959 ¡Voy bien, Camilo¡ y la
satisfacción de todos se multiplica en la Isla : ¡Vamos bien, Camilo¡.
