Por
Rodrigo Motas Tamayo
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Desandan las sonrisas repartidas por las calles de pueblos y ciudades, y rostros
pletóricos de alegría alumbran este lunes por que el cumpleaños es de todos: se festeja los aniversarios 49 de la Unión de Jóvenes Comunistas
y el 50 de la
Organización de Pioneros José Martí.
No
hay diferencia de edad entre pequeños, adolescentes y jóvenes para sentir
el orgullo de ser cubanos y la
celebración arrastra a todos en el barco
de la esperanza que juntos echan a navegar hacia el futuro.
Niños con sus pañoletas azul y roja, adolescentes con sus distintivos
de la estrella solitaria y jóvenes con manos encallecidas por el trabajo
se unen en la fiesta grande para celebrar los nuevos aniversarios de esta victoria de pueblo.
Fiesta
grande de disfrute popular en instituciones culturales, parques y plazas;
acampadas, playas, ríos y sitios históricos donde la rutina de los días se ha
roto con el jolgorio de quienes saben querer y se empinan hacia el mañana.
Y
es que el sortilegio de este Lunes abrió
con matutinos especiales, mítines relámpagos, lectura de comunicados y
convocatorias que hablan del compromiso político y social de los jóvenes de hoy
con la patria y el futuro, sobre todo en las batallas de la economía y el
mejoramiento de la sociedad y su proyecto socialista.
Y
en las aulas los chiquitines de casa extendieron su manita blanca sobre el rostro para decir Seremos como el Ché, enardecidos de dicha y
felicidad por la celebración de este
cuatro de abril, la fiesta grande de quienes navegan en hacia el mañana como los conquistadores del futuro y dueños del legado socialista de la Revolución cubana.
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